jueves, 14 de junio de 2012

Georg Trakl en el ocaso





Georg Trakl en el ocaso

Un rostro púrpura se ciñe al abrazo calcinado de la noche.
El espíritu oscuro de los bosques, las sombras venenosas,
el grito moribundo de los guerreros otoñales,
cubren de opio el azulado cuerpo de espino.
Aletean los murciélagos alrededor del joven que sueña.
Se escucha un lamento crepuscular.
El niño Elis le besa la frente sangrante
y la hermana juega con alcoholes mortíferos,
deambulando entre los catres del centro hospitalario.
Qué luna más amarga. Cuánto silencio sobrevive
en el canto último del mirlo.
Tierra negra amasa una música nocturna
y se extingue un corazón huérfano de flores amarillas.
La tumba aguarda a los ángeles caídos;
un venado azul corre en delirio a la primavera.


Henry Alexander Gómez,
del libro Memorial del árbol (2012)




2 comentarios:

Anónimo dijo...

Excelente poema :). Amo la poesía de Trakl.

Alberto dijo...

Ese misterioso Elis aparece en otros poemas de Trakl. De hecho, mi favorito es "An den Knaben Elis" (Al niño Elis). Los más bellos poemas suyos están contenidos en el libro "Sebastian im Traum".
Trakl es mi poeta favorito en lengua alemana.
Alberto.

Mi blog: www.cineyliteraturamiticos.blogspot.com